Ella sostiene mariposas. De repente abre los ojos y todo se detiene, como una orden que todos saben menos yo. Los párpados caen y vuela el mundo. Cuando entendí el movimiento, cierra los ojos y desaparezco yo, ignorado e ignorante, afilado de curiosidad. Cómo es el truco, cómo se hace.
Ella sostiene una mariposa. La mariposa se hace oruga y se duerme hasta nacer otra vez. Ahora callo para no entorpecer el acto: ella entrecierra los ojos y sopla sobre la crisálida y el proceso vuelve a suceder: ahora ella sostiene una mariposa.
Es demasiado para mí. Acepto ilusiones, pero con la vida no se juega: cómo es que puedes dar vida al soplar, le pregunto hinchado de ansiedad. Esta vez, ella me sopla y desparezco. Sólo puedo contar esta historia. Ahora sólo puedo contar una y otra vez el mismo acto.
Over.
2 comentarios:
La vida no se sopla, tenes q esperar el soplo.
Que lindisisimo.
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