jueves, 19 de junio de 2008

Pozo negro



Un lago lleno de cerdos, flotando.

Te lo cuento, está bien, pero te pido,
te ruego:
No me hables de dinero, de cuchillos,
de lo que ocurrió cuando no llegaste
del fuego sobre tu cara
ni de la violenta ausencia de dolor.
Menos aún,
esto que quede claro:
Ni siquiera insinúes que velo primaveras.


Over.

1 comentario:

Mariana dijo...

Guau, que fuerte. Que bueno que aportaste al espejo, voy a mirarme de vez en cuando por aca entonces =)!

Se grabó el disco, o no?